que fotografiaba en sus ratos libres
Gracias a la artista Consuelo Méndez descubro el portafolio de la fotógrafa francesa-estadounidense Vivian Maier, quien ayer cumplió dos años de fallecida y cuyo extraordinario trabajo comienza apenas ahora a conocerse y reconocerse. Maier llegó a los Estados Unidos en la década de los treinta y siempre trabajó como niñera entre Chicago y Nueva York. Sus fotos dejan ver sus andazas callejeras en sus días libres, sus ratos con los ojos afincados en su RolleiFlex.
“John Maloof, un joven de Chicago, adquirió una caja con negativos en una subasta de muebles y antigüedades, pensando que podrían servir para un libro que preparaba sobre la historia del Noreste de Chicago. En cuanto empezó a escanear los negativos llegó a la conclusión de que no le iban a servir para su libro, pero igualmente se fue convenciendo de que aquellas no eran imágenes comunes. Su intuición y cierto consejo de algún experto, lo llevaron a adquirir el resto de las cajas y a mantenerse en la búsqueda de todo el material posible. No fue sino 2 años después de su primera compra que dio con el nombre de la fotógrafa, escrito a mano en un recibo de la tienda de fotografía que utilizaba, al hacer de inmediato una búsqueda en Google el resultado fue un obituario publicado hace dos días: Vivian Maier había muerto”, escribe José Ramírez a principios de este año. (VER nota completa)
Una larga y emocionada nota del periodista Marco Tulio Socorro en su blog Blungún nos termina de contar la historia de esta fotógrafa increíble. (VER)
Selecciono para hoy y para lo que queda de este fin de Semana Santa, aquellas imágenes que, entre muchas otras conmovedoras y perfectas, tienen que ver con la gastronomía y sus infinitas aristas.
La página web de Maier está llena de asombros: http://www.vivianmaier.com/
“John Maloof, un joven de Chicago, adquirió una caja con negativos en una subasta de muebles y antigüedades, pensando que podrían servir para un libro que preparaba sobre la historia del Noreste de Chicago. En cuanto empezó a escanear los negativos llegó a la conclusión de que no le iban a servir para su libro, pero igualmente se fue convenciendo de que aquellas no eran imágenes comunes. Su intuición y cierto consejo de algún experto, lo llevaron a adquirir el resto de las cajas y a mantenerse en la búsqueda de todo el material posible. No fue sino 2 años después de su primera compra que dio con el nombre de la fotógrafa, escrito a mano en un recibo de la tienda de fotografía que utilizaba, al hacer de inmediato una búsqueda en Google el resultado fue un obituario publicado hace dos días: Vivian Maier había muerto”, escribe José Ramírez a principios de este año. (VER nota completa)
Una larga y emocionada nota del periodista Marco Tulio Socorro en su blog Blungún nos termina de contar la historia de esta fotógrafa increíble. (VER)
Selecciono para hoy y para lo que queda de este fin de Semana Santa, aquellas imágenes que, entre muchas otras conmovedoras y perfectas, tienen que ver con la gastronomía y sus infinitas aristas.
La página web de Maier está llena de asombros: http://www.vivianmaier.com/
2 comentarios:
Qué delicia de fotos.
Me encanta la de Agosto 12 NY, se puede ver el reflejo de Vivian Maier tomado la foto.
Precioso trabajo, como siempre.
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