miércoles, 20 de julio de 2011

El final de un taller de poesía documental

Mancha de vino al pie del Annapurna
©Jacqueline Goldberg

Foto: Jon Arnold


Invitamos al poeta a mostrar su libro en construcción.
Trata sobre el Annapurna,
la décima cumbre más elevada de la Tierra,
una de las llamadas ochomiles:
montañas que conocen el límite exacto
del desamparo y los cielos.

El poeta habló sobre alpinistas
que fallecen al descubrir cimas
y vastos abismos.

Habló de muertos abandonados
en el sosiego de su logro.
Sin aliento, sin tumba.

Nos llevó al Annapurna.
Con Google Earth
escalamos los macizos del Himalaya,
sus paredes tenaces,
sus nieves taciturnas.

Y justo cuando volábamos,
rotundos de vértigo,
estalló una botella de vino,
se hizo charco al pie de aquella sesión de orfandad.

La mancha fue recogida,
las palabras ensobradas,
la tarde pospuesta en el foso de la plaza.

Absorbimos, frotamos,
pero el granito durmió
en sanguíneos restos de Malbec.

Así acabó el taller de poesía.
Por la mancha que no lamí,
que no expliqué, que fue de todos y de nadie.

Desde una pecera me humillaron.
La vid me volvió deplorable.

Conté al poeta mi tragedia.
No se sorprendió:
“es que el Annapurna es montaña peligrosa,
todo en ella traiciona, maldice, perece”.

Y su simplísima explicación bastó
para aliviarme y reconocer
—ya para nada—
que existen innumerables productos
capaces de arrasar una sombra rubí:
agua y bórax,
vino blanco,
limón,
sal de mesa,
químicos baratos,
agua y jabón.

Pero igual me echaron,
mis honorarios fueron retenidos
para limpiar culpas y rocas plutónicas.

Una funcionaria me sobó las mejillas
mientras decía que el Presidente
es más terrible que un suelo enrojecido.

Lo sé. No me lo digan.
Todo tiene su final,
la poesía no basta.


Blog del Taller de Poesía Documental (Pusle AQUI)

5 comentarios:

Fedosy Santaella dijo...

Qué belleza, Jacqueline.

Marco T. Socorro dijo...

Yo quiero hacer ese curso de poesía documental que acaba en derrame de vino.

Jacqueline Goldberg dijo...

Cuánto me reconforta que los dos comentarios a mi poema vengan de dos grandes narradores. Gracias!!

Fina dijo...

Pero igual me echaron,
mis honorarios fueron retenidos
para limpiar culpas y rocas plutónicas.

Maravillosa limpieza conocida.
genial.Bellisimo Jaquelina

julio e. dijo...

de pagina en pagina y partiendo de lo de biscuter he encontrado otro blog de reflexión, comprensión de lo culinario. he llegado desde el sur de america y espero volver y volver.
he visto y leído cosas que me restauraron.
un abrazo