sábado, 28 de mayo de 2011

Expropian estacionamiento de un restaurante en Caracas

La indignación también cabe


En lo que va de año, el presidente venezolano Hugo Chávez Frías, ha ordenado la expropiación de 78 inmuebles, 44 de los cuales aparecen en la Gaceta Oficial número 39.682, publicada ayer.
Entre lo hurtado a mansalva —aquí no valen términos legales— se encuentra el estacionamiento del La Huerta, restaurante español con treinta años de tradición, de los mejores de Caracas, propiedad de los hermanos Gumersindo y Reinaldo Romano que saben de gastronomía y han puesto el alma a un local de tradición que posee, además, una de las bodegas más importantes de la ciudad.
La indignación nos arropa. Me arropa. Este no es un blog de noticias ni denuncias, pero no puedo dejar pasar por alto las inmundicias entre las que vivo. En mi país, la gastronomía no sólo es asunto de placer, también de agobios políticos. Y en el caso del restaurante La Huerta de una humillación superlativa que siembra precedentes para la expropiación de cualquier terreno, cualquier tajo de nosotros mismos.
Ayer —mientras militares mantenían el estacionamiento cerrado y se paseaban orondos por él, con su pequeño y barato triunfo— los empleados del restaurante, que son más de sesenta, sacaron a la calle mesas, sillas y paelleras y se mantuvieron protestando por la injustificada medida.
"La milicia llegó el jueves a la 1 pm y se apoderó del estacionamiento (400 Mt2), propiedad privada que compramos en 2004. El Estado nunca negoció los terrenos, los expropió sin pagar. Les ofrecimos colaborar con materiales para los damnificados y se negaron", señaló Egidio Romano.
Venezuela está llena de terrenos baldíos, edificaciones subutilizadas por el propio Gobierno y se empeñan justamente en el estacionamiento de un restaurante donde dicen que alojarán a damnificados de las lluvias del año pasado. Sin estacionamiento, por la zona donde se encuentra, el restaurante tendrá como destino seguro su cierre.
De lo que se trata esto y todo lo que ocurre en el país es de humillarnos.

Bodega de La Huerta

Sobre el Restaurante La Huerta
•Los Romano /Adriana Gibbs (Ver)
•El cordero llegó a La Huerta / Gulliana Chiape (Ver)

jueves, 26 de mayo de 2011

Un poema de ELEONORA Requena

Y un homenaje a LEONORA Carrington

Obra de la pintora y escultora mexicana Leonora Carrington,
fallecida hoy 25 de mayo


Descubrí lo siguiente y lo comuniqué al mundo: La evolución cultural
equivale a la eliminación del ornamento del objeto usual.
Creí con ello proporcionar a la humanidad algo nuevo con lo que alegrarse,
pero la humanidad no me lo ha agradecido.

Adolf Loos
(Ornamento y delito)



nada voluntaria el hambre
es cosa dentada, montaraz, írrita
garabatea ganas entre carnes salcochadas y vegetales tibios
es un hambre a secas
atávica, contumaz , asidua
la mastico entre bocados breves y parsimoniosos
en las raciones justas de los platos servidos
ni las copiosas fábulas o los profusos adjetivos
logran saciar su testarudo afán
ni el aplomado celo que la ciñe

martes, 24 de mayo de 2011

Poema inédito de Gabriela Rosas


Ausentes

Uno extraña al que se ha ido
por el gusto de sentirse en algún sueño
en alguna gota de agua
que se quedó en los labios

Cada despedida es para siempre
una posibilidad

Uno extraña al que se ha ido
para vivirlo de cerca
Intentar la sonrisa
el verbo incendiario
y el limón que se usó para encontrarnos

Uno extraña al que se ha ido
porque realmente se extraña uno
Para recordarse uno.



La autora
Gabriela Rosas cursó estudios de Educación Integral en La Universidad Pedagógica Experimental Libertador. Ha publicado los poemarios: La Mudanza. Editorial Eclepsidra. 1999. Caracas - Venezuela y Agosto Interminable. 2008. Editorial Eclepsidra. Caracas - Venezuela. Ha sido incluida en las siguientes Antologías de poesía venezolana: Las Voces de la Hidra: La poesía venezolana de los años ´90. Miguel Marcotrillano L. Ediciones Mucuglifo. 2002. Mérida- Venezuela y en El Coro de las voces solitarias: Una historia de la poesía venezolana. Rafael Arráiz Lucca. Editorial Eclepsidra. 2003. Caracas - Venezuela. Sus poemas han sido traducidos al catalán. Ganadora del Primer Premio Nacional de Poesía para Jóvenes Liceístas "Pérez Bonalde".Venezuela - 1995.
Ha participado en numerosos recitales y encuentros literarios. Invitada a la Semana Internacional de la Poesía de Venezuela y al III Salón Pirelli de Jóvenes Artistas, entre otros. Ha realizado talleres de poesía y narrativa con: Santos López, Carmen Verde, Fedosy Santaella, Joaquín Ortega y Roberto Echeto, entre otros. Sus poemas han sido publicados en diferentes revistas y periódicos.


Este poema fue leído
en el Segundo Jamming Poético,
realizado en el Ateneo de Caracas
el pasado 19 de mayo.

lunes, 23 de mayo de 2011

Poemas inéditos de Keila Vall De la Ville

Siempre con asomos gastronómicos


Pasaporte

Hay objetos
que son puente
y que son llave.
No hace falta explicar.
Hay objetos
que son viaje.

Una esfera
verde y brillante
un chocolate oscuro con sal marina
brunello di montalcino a las doce y veinticuatro.
Hay objetos que son llave.

Tomo este pequeño planeta
toco
o imagino
su superficie rugosa, lisa, herida.

Cierro los ojos.

Aparezco en la terraza
de un lugar en Caracas
Veo plantas tras el cristal.

Mi fruta pasaporte
me recuerda que
una mesa de noche me espera
allí él descansa mientras llego.

Es un ancla
a aquel patio
en cada puesto un cuaderno
una carpeta con liga
un lápiz
y yo.

Un limón.
Pasaporte cable a tierra puente y llave
esfera
verde brillante
rugosa o lisa.

Me recuerda
de dónde vengo
y que no me voy.

Hay pasaportes
de
pasaportes.




Sentidos
Así como de pronto uno ve la música,

oye el color…

Roberto Juarroz

I.

Dios me queda entre las cejas

y el centro del pecho.

Allí no es sólo músculos
huesos
sangre.



Dios me queda allí.



II.
Por la manera en que me nombras

(hay algo que dices, o será la forma,)

sé de precipicios.
Es cuestión de la palabra.

Si me llamas mujer

o si pronuncio
cierto número
junto a la palabra
chocolate,
puedo no mirar

y con todo,

saber que se derrite,
se vuelve pasta.

Puedo imaginar

mi lengua aprisionada,

revolviéndose en sí,

soltando líquidos.



III.
no todo lo que parece es,

pero a veces ayuda.


La autora:
Poeta venezolana, nacida en 1974. Antropóloga y Magister en Ciencias Políticas. Escaladora de rocas y montañas. He publicado un libro de cuentos: “Ana no duerme”, finalista en el Concurso de Autores Inéditos de Monte Ávila Editores en 2007. Participó en la IV Semana de la Nueva Narrativa Urbana en 2008. En el 2010 obtuvo una Mención Honorífica en el VII Concurso Nacional de Cuentos SACVEN y otra en el IV Concurso de Cuentos de la Policlínica Metropolitana. Ha colaborado con las revistas Exceso y Contrabando.
He cursado distintos talleres de escritura. De narrativa con Luis Barrera Linares, con Carlos Noguera, con Milagros Socorro, con Kiko Amat y con Santiago Nazarian. De poesía con Edda Armas y Cecilia Ortiz, y de guión cinematográfico (ficción y documental) en el Centro Nacional de Cinematografía (Caracas) y con Robert McKee en NYC.
Su trabajo puede leers en el blog: Fuga permanente

Estos poemas fueron leídos
en el Segundo Jamming Poético,
realizado en el Ateneo de Caracas
el pasado 19 de mayo.

domingo, 22 de mayo de 2011

Semillas de girasol: la protesta de Ai Weiwei

El artista chino está preso
desde el pasado 3 de abril



El polifacético artista Ai Weiwei —llamado el "Andy Warhol chino"— llenó la sala de turbinas de la Tate Modern de Londres con 100.000 pipas de girasol en una obra titulada Sunflower seed que clausuró este mes de mayo. El reconocido museo del Reino Unido logró tal prodigio gracias a 1.600 artesanos que decoraron una a una las semillas fabricadas en porcelana china y que crujían bajo las pisadas de los visitantes hasta que dicha actividad fuera prohibida.
«Las pipas escondían contraindicaciones», ha señalado el diario El País, «la pintura utilizada para decorarlas tiene una alta concentración de plomo y la fricción de unas con otras ocasiona un nivel exagerado de polvo de cerámica perjudicial para la salud. Así que la instalación ha sido acordonada y la interacción prohibida».
»La sorprendente obra ha sido capaz de sobreponerse a todos estos inconvenientes. Weiwei realizó 10 ediciones de la obra, en formato pequeño (sólo 100.000 pipas), y la casa de subastas Sotheby's acaba de vender una de ellas por algo más de medio millón de dólares (413.728 euros). Fueron cuatro los postores que pujaron por la montaña de pipas y, finalmente, el comprador telefónico desembolsó según los cálculos de la casa de subastas, unos 5,60 dólares (4.14 euros) por cada una de las pipas».


Pero no fue el temor a la contaminación producida por las semillas de cerámica lo que hiciera que el pasado 3 de abril el artista Ai Weiwei —activista pro derechos humanos, siempre crítico de la opresiva realidad china— fuera detenido en el aeropuerto de Pekín cuando se disponía a volar hacia Hong Kong. El artista aún permanece detenido y la policía —tras largos 45 días—aseguró apenas ayer que ha encontrado que una compañía controlada por el artista y activista evadió "una enorme cantidad de impuestos".
Ayer, tras conocerse las acusaciones, la familia del artista mostró su total rechazo, y señaló que no les habían informado personalmente de estos cargos. «Es horrible y vergonzoso que un país que se dice regido por la ley trate sus propias leyes así», señaló la madre del artista, Gao Ying, en declaraciones al diario "South China Morning Post" y reproducidas en nuestra lengua por la Agencia EFE.
Añade EFE que «la detención de Ai, de 54 años y conocido, entre otras cosas, por haber participado en el diseño del Estadio Olímpico de Pekín, ha producido fuertes críticas de la comunidad internacional contra el Gobierno chino, tanto por parte de organizaciones pro derechos humanos como Ejecutivos o museos y artistas. Ai es conocido también por su activismo político, pues en ocasiones ha abanderado la lucha de colectivos "olvidados" por Pekín, como los padres de los niños fallecidos en las escuelas que se derrumbaron tras el terremoto de Sichuan, en 2008».
Está claro, pues, que la captura del artista tiene que ver con una campaña de represión ejecutada contra la disidencia china, «en la que 200 activistas, intelectuales y abogados han sido detenidos, han desaparecido o han sido acosados, después de que el premio Nobel de la Paz recayera en octubre pasado en el preso político Liu Xiaobo», señalaba otra nota de la Agencia EFE.


Más allá del arte, las semillas de la salud
Más allá del lúdico y provocador intento de Ai Weiwei y la creencia de que las semillas o pipas de girasol son alimento para hamsters o loros, éstas constituyen una auténtica maravilla de la naturaleza. Se sabe que fortalecen el corazón, ayuda eficazmente a combatir el envejecimiento, manteniéndonos además mineralizados. Por su alto contenido en Potasio y Magnesio las hacen indispensables en la dieta de todos los deportistas para mejorar su rendimiento y reducir las lesiones. Sus altos niveles de fósforo y magnesio también favorecen un buen funcionamiento cerebral. Su alto contenido en vitamina E las hacen muy recomendables para nutrir la piel ya que además es un antioxidante.
«El aceite de semillas de Girasol es también un aliado para tratar el cabello seco; podemos aplicarlo con un suave masaje y dejarlo algunos minutos mientras cubrimos la cabeza con una toalla caliente para que haya mayor absorción, luego lavas y enjuagas para ver los resultados. En la piel, el aceite de Girasol también es benéfico y lo puedes aplicar untado sobre un algodón sobre aquellas zonas críticas que han sido invadidas por el resecamiento. Puedes pasar toda la noche con la piel untada en el aceite y al otro día comprobar cómo las arrugas se van desvaneciendo». (esBelleza.com)

Artículo reciente sobre el caso de Ai Weiwei
Ai Weiwei rompe los moldes (Ver)

Sobre la obra de Weiwei
Cuatro ideas sobre Sunflower seeds de Ai Weiwei (Ver)

jueves, 19 de mayo de 2011

Gatos en la cocina

Poemas de convivencia gatuna

A quienes no gustan los gatos, verlos en la cocina, atravesadas, regando su pelambre entre ollas y conversas, parece un horror. Pero hay quienes los adoran y les permiten formar parte del tibio recodo.

Foto: Jacqueline Zilberberg (Ver su web)


En la cocina
Eliseo Diego

Enrosca el gato su delicia
de sí sobre sí mismo, duerme
de su principio a fin, secreto.
En tanto
esboza la penumbra disidencias
de cazuelas y potes, resistentes
al imperio del sueño.
Cae el mundo
por el filo del agua, gruñe
para sí el fuego, pero el gato
lo ignora:
permanece
sencillamente, inmune
a memoria y olvido, a salvo
en la delicia de su ser
-perfecto.



El gato Mauricio
Julia Hartwig
Traducción Bárbara Gill

Lo llenan de insultos como ladrón gangster
abusador y estafador vagabundo y matón
Molesta durante las comidas salta sobre la mesa
y husmea entre vasos y copas
rompe los paquetes de comida trae entre
[las faucecitas un pájaro muerto
que había decidido explorar a pie el
[césped de la casa
y pagó con su vida el imprudente paseo
Sin apelación demanda entrar o salir de la
[habitación o la cocina
se mete en trifulcas feroces con los gatos vecinos
mientras lanza estremecedores chillidos de fiera salvaje
No adula a nadie y es intransigente en sus deseos
indiferente a las órdenes y caricias
sí caricias porque sin tomar en cuenta su naturaleza
lo acarician y abrazan
encantándose con su paso muelle y diestros saltos
le alcanzan los mejores bocados y lo
[dejan dormir en sus camas
O sea no se premia con amor la virtud ni la afabilidad
ni la obediencia o lealtad
sino el encanto y la insumisión
la vida en sí misma en toda su evidencia
la hermosura y las miradas cautivantes
Es grande nuestra necesidad de amar

miércoles, 18 de mayo de 2011

Hoy, Día Internacional del Museo

Raros museos gastronómicos


El Día Internacional del Museo tiene su origen en la Cruzada de los Museos, campaña informativa organizada en 1951 por la UNESCO y el ICOM, con el propósito de crear conciencia del relevante papel que corresponde a los museos en la sociedad. En el año de 1977, durante la XII Conferencia General del ICOM en Leningrado, y considerando aquella iniciativa, fue instaurado el 18 de mayo como una fecha significativa en que las naciones se unen en una suerte de fiesta de los museos.
Según el Consejo Internacional de Museos ICOM en su artículo 2, “Un Museo es una institución de carácter permanente y no lucrativo al servicio de la sociedad y su desarrollo, abierta al público que exhibe, conserva, investiga, comunica y adquiere, con fines de estudio, educación y disfrute, la evidencia material de la gente y su medio ambiente”.
Ciertamente la palabra Museo da para mucho y establecimientos reales y virtuales no demasiado estrictos se apegan a la legitimadora palabra para mostrar asuntos no necesariamente museables. Si bien los hay muy serios, en materia gastronómica también los hay muy curiosos :


Museo de la comida quemada
Idea de Deborah Henson-Conant, una conocida artista estadounidense, ofrece muestras fijas y temporales de cualquier utensilio o bocadillo devorado por las llamas. (Ver)


Museo del jamón
Es una hostelería y restaurante, el templo del jamón en Madrid, con doce establecimientos. Fue fundado en 1978 por los hermanos Don Luís y Don Francisco Muñoz Heras. (Ver)

Museo del gusto
Está situado en Italia, a treinta kilómetros de Torino. Es un viaje por la historia de la alimentación, con información sobre alimentos como el pan, el vino o la pasta a través de apetitosos itinerarios del gusto. También muestra como el sentido del gusto se ha tratado en el arte, la publicidad, el cine, la música y en los dibujos animados. (Ver)

Museo del Cocktail Americano
Estaba ubicado en New Orleans, dentro del Museo de comidas y bebidas sureñas, pero tras el terrible huracán Katrina fue mudado a Las Vegas. El museo apoya e inspira la creación contemporánea en la coctelería, tanto como lo hace con la historia rica y colorida de los cócteles. Quienes lo visitan pueden probar las creaciones originales de los fundadores. También invitan a los más famosos y prestigiosos Bartenders y camareros del país para dictar cursos y seminarios. (Ver)

martes, 17 de mayo de 2011

Del más brasileño de los poetas brasileños

PEQUEÑOS ASESINATOS
Affonso Romano de Sant´Anna

Traducción de John Galán Casanova,
especial para Textos en su tinta


Bodegón de caza, hortalizas y frutas, firmado «Ju. sanchez cotan f./1602»,
Museo del Prado, Madrid, óleo sobre lienzo


Vegetariano
no evito llorar
sobre las legumbres descuartizadas
en mi plato.
Tomates sangran en mi boca,
lechugas desmayan en su salsa de mostaza, aceite y limón,
cebollas sollozan sobre la pila
y oigo el grito de las papas fritas.
Como.
Como un salvaje, como.
Como tapándome los oídos, cerrando los ojos,
distrayendo el paladar en el paisaje,
con la voluptuosidad displicente
de quien mata para vivir.
En la sobremesa
continúa el verde desespero:
peras degolladas,
higos destazados
y yo chupando el cerebro
amarillo de los mangos.
Eso acá afuera. Porque adentro,
bajo la piel, una intestina disputa
me alimenta: oigo el lamento
de millones de bacterias
que el lanzallamas de los antibióticos
exaspera.
Por donde voy hay luto y lucha.



Affonso Romano de Sant´Anna

(Bello Horizonte, 1937)

»Luego de una larga trayectoria docente en su país y en el exterior (Francia, Alemania y Estados Unidos), actualmente se encuentra en Río de Janerio. Fue presidente de la Biblioteca Nacional de esta ciudad, en la que hizo una verdadera revolución creando el Sistema Nacional de Bibliotecas y el innovador Programa Nacional de Promoción de la Lectura (Proler). Con la revista "Poesía Siempre" estableció diálogos entre la poesía latinoamericana y la brasileña. Participó en festivales de poesía en varios países, y fue jurado del Premio Pérez Bonalde (Venezuela) que premió a Enrique Mollina y del Premio Reina Sofía que premió a Gonzalo Rojas».
Fuente: Poéticas, antología de la poesía universal.

lunes, 16 de mayo de 2011

Chocolate y poesía

BRECHA GENERACIONAL
Hernán Zamora



Mi hijo no gusta del trozo de chocolate que le ofrezco

No puede explicármelo

Ante mi asombro e insistencia
sólo repite –sabe horrible

No puedo comprenderlo
tiene el equilibrio justo
entre un cuarto de dulzor
y el resto en amargura
que necesito para vivir

(Me aterraría saber que es demasiado dulce para él)

sábado, 14 de mayo de 2011

¿Vinos para el mundo gay?

¿Discriminación o mercadeo?


Suena a aberración en este ya no tan nuevo siglo. Y parece que no se trata de discriminación sino de una estrategia de mercadeo, aunque la sola diferenciación ya implique intolerancia.
Es así como Bodegas y Viñedos de la DO Ribera del Duero lanzó bajo la marca Mundo Gay un caldo especial para la conquista del mercado de diversidad sexual.
Dice el portal de éstos vinos, que solo vende desde la web y en ciertos lugales de España (http://www.vinogay.com): “Queremos que nuestro vino perdure y forme a su modo parte de unos momentos especiales en los que el mundo cambia y se adapta a una realidad diaria, a un grupo humano que se merece ser reconocido por las pruebas diarias a las que se enfrenta”.
El lanzamiento del vino se produjo hace tres años ya en el conocido Barrio Chueca de Madrid, con la asistencia de dos centenares de personas. De acuerdo a los elaboradores, Mundo Gay “se utilizará en dos referencias, un Crianza, que se encuentra en plena promoción y que hace poco más de un mes que salió al mercado, y un Reserva que verá la luz a finales de año”.
Ambos tipos de la nueva bebida alcohólica son monovarietales de Tempranillo, y por ahora su comercialización se realiza exclusivamente a través de Internet.
Sus promotores esperan entusiasmar al colectivo LGBT en el que tienen esperanza de encontrar una respuesta positiva a la oferta.

Y otro
Otro vino que se ha lanzado al difícil ruedo de hacer creer que hay un paladar gay y por tanto un vino para él, es Pilot Gay Wines (http://www.pilotgaywines.com/) de Argentina, creado para la comunidad Gay frendly del país sureño y con una amplia variedad de cepas.
En Argentina este vino se vende en la Gay Wine Store, una tienda que busca una identidad afincada en los gustos de la comunidad homosexual.


Gay Wine Store en Buenos Aires

lunes, 9 de mayo de 2011

Confieso: comí iguana

Mejor lejos que guisada

Me dijeron que era pollo, estaba guisada. Su carne suave, dulce. Al día siguiente me hicieron repetir. Cuando señalé lo rico que estaba, mi madre confesó. Era iguana. Seguí comiendo. Era una niña, pero entendí que el asco es cosa de la mente y la cocina un mundo al que hay que estar abierto. Sólo eso me ha permitido probar gusanos, hormigas y araña mona en el Amazonas.
Por aquella vieja historia mía, reproduzco aquí el cuento de Norberto José Olivar con el que obtuvo el obtuvo el Sexto Premio Internacional de Relato Sexto Continente de Radio Exterior de España y Ediciones Irreverentes.



Odio a las iguanas

Por Norberto José Olivar

A mi madre,
aunque no lo merezca


Odio a las iguanas. Me gusta irlas espachurrando, una a una, con el carro. Perseguirlas, acorralarlas y, finalmente, compactarlas al asfalto y dejarlas en el puro cuero. Pero no siempre fue así. Para justificar esta rara obsesión, confieso, con cierta vergüenza, que mi infancia transcurrió en una clínica siquiátrica conocida como «La Ricardo Álvarez». Era el manicomio de los ricos, de los mantuanos, diríamos hoy. Estaba en las primeras cuadras de la avenida Bella Vista, dos edificios blancos de tres pisos, con un hermoso y amplio jardín en medio que servía de unión. Y muchos árboles, enormes, en los alrededores. Mi padre era el Jefe de Administración, y mi madre enfermera del edificio de mujeres. De modo que, a falta de niñera, me iba con ellos al trabajo y me soltaban en aquel inmenso vergel como si fuera el Central Park. Y por supuesto, acabé amigándome con muchos locos de los de «verdad». Había uno que corría descalzo por todas partes con un casco de moto, y yo me desarmaba el esqueleto tratando de alcanzarle en mi Harley Davidson Elektra de 500 cc o más. Recuerdo, también, una vieja llorona y piche a la que tenía un miedo atroz, me abrazaba y me llamaba por el nombre de su niño muerto. Mi madre, muy calmosa, me decía que le siguiera la corriente, «tranquilo, mi rey, que no te va a morder» aseguraba riendo. Otro se pasaba el día sentado bajo el sol pensando en conspiraciones insólitas, encamisado a la fuerza y repartiendo maldiciones e improperios a diestra y siniestra. En una silla de extensión, apartado, con las sienes calcinadas, estaba un hombre, grande, canoso, con la cara ladeada y babeando constantemente. Mantenía la mirada perdida y me parecía que se aburría todo el tiempo. Y así, sería imposible hablar de la variedad de locos que vi desfilar durante esos años. Pero un día —fatídico— llegó uno al que le dio por cazar iguanas. Me dijo que las iguanas cuando se las ve boqueando es porque quieren absorber tu alma, son enviadas de satanás para espiarnos, «se te quedan mirando y si te muerden, sólo que dios haga tronar te sueltan, si no te dejan seco», decía cuchicheando, con miedo a que alguna de ellas pudiera oírle. Y una tarde, nublada y calurosa, me pidió que le siguiera al extremo norte del jardín para mostrarme algo. Fuimos tras los arbustos y quedé petrificado con tantas iguanas que había matado. Sin embargo, una —la más grande y monstruosa— estaba viva e inquieta. La tenía atada del cuello como a un perro, «esa tenéis que matarla vos», dijo con seriedad aterradora, y me dio una piedra para que le machacara la cabeza. Pero apenas pude acercarme. La iguana tenía los ojos rojos y lengüeteaba amenazante. Entonces saltó a morderme y a darme “rabazos” enfurecidos. Los gritos alertaron a mi madre y al resto de la enfermería de guardia. No recuerdo nada más. Según cuentan, me desmayé bajo las garras de aquel lagarto infernal.
«Todavía estabas muy chiquito cuando eso» dice ella, mi madre, muerta de risa, cada vez que lo recuerda y vuelve a contármelo.

domingo, 8 de mayo de 2011

¡Odio comer en la cama!

Incluso en el Día de las Madres

Obra de Fernando Botero

Soy la Grinch del Día de las Madres. Detesto el sábado previo, de centros comerciales abarrotados y tráfico enloquecido. No soporto la obligación de dar regalos, salir a comer con la suegra y creer que es un día especial. Ya sabemos aquello de que el Día de la madre son todos los días y blablabla…
Tampoco me hace gracia eso de que me lleven el desayuno a la cama. ¿Quién habrá inventado semejante insensatez? Supongo que los romanos, que adoraban comer acostados.

En el Día de la Madre te sorprenden con el desayuno y no hay forma de levantarse a hacer pipí. Luego está el ejercicio de equilibrista requerido para que la bandeja amorosamente preparada no termine en el suelo o regada sobre las sábanas. También es importante pensar en el dolor lumbar que a ciertas edades produce el mucho rato sentada con las piernas estiradas, toda una calamidad para la circulación. Los médicos recomiendan a los insomnes como “higiene del sueño”, huir de la cama para cualquier cosa que no sea dormir o hacer el amor: nada de comer o ver televisión o leer en ella.
Comer en la cama parece tan insufrible como agradable. Por un lado se inventan artefactos para amortiguar los percances, y por otro se ponen de moda los restaurantes con camas protagonistas. Entre gustos y colores…
Comer en la cama me parece asunto de enfermedad y hospitales. Yo prefiero levantarme y hallar una mesa bien servida.

Esta colcha o sobrecama está hecha en una tela impermeable
y tiene incorporado un práctico babero. Los colores dan la idea de un picnic.


Este Buddah Bowl es una manera fácil y cómoda de comer cereales en la cama.
Su asa en la parte inferior permite tomarlo fácilmente
y es apta para microondas y lavaplatos.


En Amsterdam —con sucursales en otras metrópolis—
está el Bed Supper Club, un restaurante donde la gracia
es comer en una cama y sobre una badeja.


Duvet, es un restaurant en New York con treinta camas
que hacen las veces de asientos.
A los clientes se les ofrecen unas pantuflas del local al ingresar al mismo.
Duvet se especializa en comida fusión americana,
y es utilizado también para fiestas privadas.

Si pese a todo comer en la cama brinda a alguien placer, en materia de bandejas hay variedad:





Para quienes hacen de la comida y la cama un rito inseparable, hay otras mullidas opciones:


sábado, 7 de mayo de 2011

Pensando en Tombuctú

EXILIO

Foto: © Guillermo Suárez / Orinoquiaphoto.com



A Michaelle Ascencio 
(en su curso sobre Jean Rhys)


Estoy en el tráfico.
En la peor hora peor.

Quiero mudarme.
A Borneo,
a Edimburgo, a Yacarta, a Tombuctú.
Donde queden caminos de tierra
y no azoten las terribles jornadas del regreso.

Tengo hambre.
La radio habla de un restaurante
que sirve langostinos al vapor.
Pienso en alcachofas despetaladas.

Pudiera comerme también un tazón de arroz,
beberme copas de espuma.
La hora me agrava.

Se trata de anhelar un exilio,
sin ambigüedad.
Aquí mismo. Ya.

Debo irme. Digo.
Debo comer.
Debo verter mis manos en una afilada bandeja,
en una mesa de Padua, Lima, Nueva Guinea,
Jaffa, Tombuctú.

Sobre todo debo comer.
Seguir.
Si acaso resignarme.



Nota del 29/03/2014: Hoy ha fallecido Michelle Ascencio. Entre lágrimas recuerdo que ella supo de este poema, lo leyó en este blog mientras tomaba un curso con ella y luego en el libro "Exilios. Poesía latinoamericana del siglo XX", de Marina Gasparini Lagrange, publicado por la Sociedad de Amigos de la Cultura Urbana en 2012.... Trato de no olvidarlo: hay que abrazar, reiterar el afecto a la gente querida. Un día uno se leventa y ya no está. Y no hay tiempo para más.... Buen viaje bella e inolvidable Michelle

viernes, 6 de mayo de 2011

Corchos más allá de la botella bebida

¿Cuál es su destino?


El corcho, ese guardián natural de los vinos, suele desecharse una vez bebida la botella. Pero hay quienes no lo hacen y ven en él un potencial objeto creativo, amén del gesto ecológico que implica reusarlo de cualquier manera. A mi me fascinan las fotos de corchos, son la abstracción perfecta. Dejo una colección de imágenes al azar de cómo se ha dado uso a ese imprescindible elemento de la industria vitivinícola, proveniente del árbol del alcornoque y que fuera usado por primera vez para estos fines por el monje Dom Pierre Perignon a finales del siglo XVII.

Salvamanteles de tapones de corcho, lo reseña Wine Lovers Web


Butaca, obra de Gabriel Wiese, hecho con 9.000 corchos

Esta “silla francesa” está compuesta por 600 corchos

Mural del artista Saimir Strati ubicado en el hotel Sheraton, en Tirania.
Utiliza 229.764 corchos de botellas de vino.

Alfombra. En el blog Limón chiflado explican como hacerla (Ver).


Ajedrez. ¿Cómo hacerlo) Aquí.